Y cuando miro hacia lo alto...
En los vapores del instante inspiro...

Robert Delaunay
Como lagartos... (Fatima)
A mis amigos...
La tarde deslizándose era de todos,
de nosotros que ya hieráticos lagartos
bebimos un sol plácido de otoño,
de los insectos casi imperceptibles
en su infinito vegetal, en un deslinde
de realidades, allí estabamos
masticando las conversaciones,
mordiendo los silencios magros,
tensando la vista en vuelos de carancho.
Las líneas de la sombra se desligaron
desde cercos, acacias, ligustros
inexorables, impiadosas, de oscuro
llenaron las formas, los vacíos.
La gata presintió a una polilla,
bajo la luz del farol fue garra y cena.
La tarde de todos, promiscua,
se replegó aún más sobre sí misma
y fue luna en su inmensidad vacía.
Línea de flotación
Tensión de las horas y sus días,
me derramo y floto, yo díscola
ante la adversidad reclamo
un plano laxo, siento sed de letargo,
inmensidad para acallar pensamientos,
para inmantar los volátiles sueños.
Todo es frugual, todo momentáneo,
y aún así persistente batallo.
Flotar, yacer. La sangre me recorre...
La locura humana se desbanda,
la ignoro, orgías de egocentrismo,
ambiciones carcomidas. Floto, existo...
y en los vapores del instante inspiro:
esenciales afectos, actos, oxígeno.
Gentileza:
http://www.huelvayork.com/2007/01/02/viaje-vacaciones-jordania/