Los años se diluyen, -Vive...


Robert Delaunay











Fin de año


No detalles..., no hagas reseñas,

no calcules, eliminar las cuentas,

me lo propongo y mi débil insistencia

golpea, pero nunca es suficiente,

martillar con obseción la mente...


-Vive, grito dentro de mi laberinto,

agradece el ahora latente y vívido.


Los colores se abren a ojos, camino

y la tarde se ofrenda a los sentidos.

Oler, movernos, la ciudad cotidiana

tiene voces reconocidas, pertenencia.

Están mis seres entorno, las sendas

de la luz y de las sombras, palpo recodos...


Los años se diluyen, -Vive... desconozco

límites, cuando.., porque..., sólo desconozco....






Medianoche


Aguas de energías, de deseos,

nos intercambiamos ávidos

de vivir expresiones de afectos.

Hay mensajes, copas en alto, sólo gestos...

Sumar mayores impulsos, humanos

posponemos la impotencia, postergamos recelos.

Pedimos lo mejor y casi al unísono,

abrillantada la noche, va el recuento,

contar minutos como empezando de nuevo...







Universo de dentados encastres...


Carlos Terribili








Deletreamos


Cada punto y uno, somos un centro,

desde él en espiral, concéntricos,

giramos, tan monotemáticos.

Universo de dentados encastres.

Temo, miro entorno, están los otros,

como desenredarnos del nosotros.

Crecen cien galácticos laberintos

dentro de los simples instantes,

conjunción de dudas, de deseos.

En susurros intento deletrear

(sin escándalo) la palabra felicidad,

(sin suspicaces, efervecentes envidias).

Ella: la felicidad no se hace, se delínea,

se desliza en búsqueda constante.

Temo ante mi subversivo intento,

susurro la f..., la e..., la l , la i...

encaro mundos de zetas adversas.


Es cuestion de insistir e insistir.



Hijos grandes


Lectura de sus gestos,

de los retazos de frases que cirujeo...

así me alimento.

Supongo, pospongo,

armo rompecabeza de vidas que aliento,

subjetivamente,

vivir se desenrosca,

se llena de voces, actos, yo espectadora

traduzco y sueño.

Ansiosamente gozo,

temer e invocar en secreto alborozo:

que crezcan libres,

velo, mar de desvelos.

A partir de hilos devano y supongo,

rondo a la par

que envejezco

sin querer reparar, lapidario es el tiempo.


Silvia Ariza


Persistimos, como pájaros porteños...



Pablo Picasso


















Nosotros pájaros

Diciembre es luz,

ella se filtra tras las persianas,

nos introduce a la mañana.


Es hora de vivir,

siempre es hora, pese a la locura urbana

hay zorzales enardecidos.


Pese a los dolores sociales

persistimos, como pájaros porteños

retumbamos en el alma.


Vivir es este disparate,

estos buenos deseos deshojados a labios,

a sonrisas, a misterios.


Sociedad de pájaros,

poseemos a retazos: casi alas, cielos,

tenaces, magros.


Otros sobre la acera

dejaron de descubrir clarear el alba

víctimas de tormenta.


20-12-03.-




Ese patio, esa parra



Las baldosas, las revivo, en damero

se arma sobre su blanco y negro

una segunda parra, un suelo

salpicado a manchas que juegan,

que traducen en gris al viento.

Es una hora tórrida, la de la siesta,

mis pies menudos, descalzos eran

otros, sucios, míos, desconocidos,

eran otros los seres de entonces

y aún los sueños, aún los olores.

Revivir las voces en su ir monocorde

desde los cuartos en sombra al verde

cielo de las plantas. Un gato negro,

el de mi abuela, la complicidad

de mi hermano, un universo quizás

distinto, ahora lo recreo casi igual.


Las baldosas del damero de la vida,

somos sombras latiendo en la brisa.



Gentileza:

dipity.com

La fragilidad nos absuelve...









Salvador Dalí




Comunión

Tontamente, como tantas veces,

las horas se resbalan entre manos,

y es que casi no nos hemos mirado,

declaran los colores su ilimitada

profusión de voces, las pupilas claman

conjunción con otras, y las palmas

nos piden posarse en huecos ajenos

y anidarlas, anidarnos mansa,

saludablemente. Horas que caen,

tiempo y días que se clausuran,

afuera el olor habla de la lluvia,

se regala a simple aspiración,

afuera en algún recorte urbano

el horizonte se proclama ilimitado

y siempre es nuestro. La piel percibe

y espera. Razón, ilusión, papilas,

comulguemos, unos y otros, y la vida.




Como astros erramos


En elípticos recorridos,

aún mínimos, como un cósmos

transitamos los ciclos,

y volvemos al punto de inicio.

Misterio del misterio,

las voces se acallan, vacías,

incoherentes suenan las teorías.

Aquí me instalo a corporizarte,

aquí tu rostro en mil partes

batalla contra la memoria.

Destino de astros errantes,

eso somos, yo de tanto descreo,

cuando la razón se desvanece

ruego y pido, así me aferro,

hilos frágiles, la intuición

sostiene, engaña. De tan endebles

la fragilidad nos absuelve.


Salvador Dalí


Humanos... o ni siquiera .... sobrevivientes...



Humana 2011


Son tantos los frentes..., la lucha es dispar,

me fracciono y me disperso, ¿a dónde van:

la energía y los sueños?. Es cuestión de tapar

la brecha de este ahora volátil. Supervivencia:

controles médicos que acreditan años, meses,

cuestión de resultados. Cotización de monedas,

perseguir la estabilidad para días, meses,

lograr no demostrar la edad real que se tiene...

lograr simular equilibrio, malabarismos de la mente.

Son tantos los frentes.. Comprender, convivir con ellos:

los temores, mis fantasmas. Ya somos sobrevivientes.


26-10-11.

Sabores de vivir entre los labios...



Calesitas


Dudas del azar,

veleta de los vientos

y la vida que sabe rotar.

Si pienso luego temo,

no vale la pena,

un damero de baldosas,

el remolino y su ruleta,

nosotros y las hojas,

las presencias que se borran.

Asirnos a besos, confidencias,

es instante de morder el ahora,

pero es imposible retenerlo.

Sentir el sol sobre la piel,

sentir la piel debajo del sol,

sentir que podemos sentir,

que giramos, y a la par vivir.



Marc Chagall











Como madre


Me extiendo, me prolongo,

en red de sueños y sabores.

No voy en ustedes, supongo,

sospecho, traduzco, es mi hora

de observarlos a distancia.

Se repiten líneas, encrucijadas,

vivir es un espejo, tan absurdo,

me extiendo en deseos que permuto

por sonrisas, combates que son suyos.

Sabores de vivir entre los labios,

juventud de otros, de aquellos

a los que amo, velo, espero,

con el ojo de mi nuca inexistente,

el que les he nombrado, desde siempre.



Silvia Ariza

No soy cobarde, sólo un poco diferente...




Sólo táctica, ni siquiera estrategia


El ejercicio de la razón

me abruma pero pienso,

y es tan escaso lo que puedo.


Juego de causas y efectos,

ajedrez de intereses humanos,

mezquinos, piezas que se mueven,

alianzas, mar de dobles sentidos.

Desconectar la razón,

las acciones llegaran inevitables.

Mar de luz rueda en la tarde,

hay sonidos de pájaros, contra el muro

blanco un gato negro, equilibrio

de enramadas en este invierno frío.

Bebo del aire: simple inmensidad,

bebo de mi sombra: noción de existir,

bebo de tus ojos: amparo, dosis de olvido.

Sentir, sentir para no pensar,

goce del color, de la piel, ay,

ay de la cotidiana realidad.


Con el viento huyo brevemente,

no soy cobarde, sólo un poco diferente.




Desde nubes


¿Cómo concentrarme en las nubes?,

suenan sirenas, el aire ruge

su vozarrón urbano,

me urge recuperar la calma,

ellas pasan por lo alto,

muy por encima de nuestra locura.

Ciudad de alienados,

las bocinas agreden a los diálogos,

¿dónde caerán las palabras

cuando son heridas a mansalva?.

Y el cielo está aún encima,

ilimitado, celeste, con la distancia blanca

de un viaje de nube.

¿Cómo nos veremos desde las alturas?,

racimo, aglomeración, suma,

Recorrer el espacio, recurso para preservarse,

el cuadro de la ventana

se nos ofrece como posible, él alcanza,

infinitud dentro de un marco,

celeste más celeste, grises y la huida vasta.


Miguel Angel

Capilla Sixtina

Mis ojos miden y rozan las yemas...



Monet, Claude






Fin de septiembre


La tarde es un sol proclamado,

las enramadas en punteado

verde doblegan el celeste

en otro grito. Miremos.

La tibieza del aire reclama

piel, brazos agitándose,

definir la vida como clara

y diaria cita con la luz.

Miremos. Somos dueños:

de la sombra y del asombro,

de la caricia, del gozo permitido,

manejemos memorias y olvidos,

ya es tiempo de absolvernos.




Tregua


Lograr la ventanilla

en el diario colectivo

nos excusa de dialogar

con nosotros mismos.



Ramas (29-8-02.)


Ramas junto al farol,

el verde viejo se aferra

a no morir y renacer,

en el aire el olor

a septiembre, a espera.


Las miro, es cuestión de días,

aún el mínimo sol es absorbido,

promesa de explosión verde, motivo

en un país ahogado en penas,

para trazar ilusionadas veredas,

para prometernos: hoy es distinto,

mis ojos miden y rozan las yemas,

cuando teniendo tan poco o nada

se espera ansiando la primavera.

Este verde nos urge, ánimas en llagas,

nos urge creer, descarnada el alma.


Gentileza: http://es.123rf.com/photo_9723818_la-parte-superior-de-rboles-verdes-hayas.html


Somos una confusa fusión...

Escher








Gozo, anticipo


Desmentir la física,

impenetrabilidad de cuerpos,

tridimensión de lo concreto.

No somos dos, tres ni cientos,

somos una confusa fusión

de ideas, sonrisas, conciertos.

Desconcertados anticipamos

el detrás de lo que está detrás,

tal vez, tan simple..., quizás...


Detrás de este vivir

esté... la fusión feliz,

el eterno encuentro,

hoy sólo espiamos el filo,

el orillo del abismo...



Hoja de ventana


La ciudad tiembla en el viento,

o es la ventana, en ella los reflejos

mueven a una urbe que se hamaca.

Ir y volver, suavemente acompasada,

intuyo un vals para esa imagen que danza...







Crecen y es extraordinario...


Pierre Auguste Renoir










Hijos

Besos de azúcar

en torno a mi cuello,

cuánto hace de ellos,

ahora hay reclamos,

arreglos de peinados,

combinaciones, intentos

de sentirse emancipados.

Crecen, es extraordinario.

Pero yo ahora extraño

dedos pintados, figuritas,

sus brazos confiados

rodeándome, rodeando

un cosmos breve y seguro,

un mundo casi asegurado.

Crecen y es extraordinario.



A un adolescente

Crecés, es difícil ver el mundo,

afirmarse, el desafío de quererse.

Repetís valores, ausente

de propias leyes, de tu razón.

Casi es inevitable la progresión,

las dimensiones cambian, son:

el cuarto, tu casa, el entorno,

el mundo. ¿Cómo mostrarte

algo distinto, cómo ayudarte

y lograr que te quieras?.

La vida tiene mil maneras

de mutar, de sorprendernos,

pero valen si las traspasa el afecto.

Estallar cuarto, privada trinchera,

lograr que intentes ser libre,

que tan sólo siendo vos te quieras.











Cachorra

Una hoja movida por el viento,

vigilante rotás orejas, el rabo,

el aire te juega, tan ingrato,

esa mala pasada, aún incauta

te derramás a ras, nuevamente,

manojo de pelos, alerta, presente.

Otra hoja te dará batalla en breve.



Persistencia de colores, de destinos...



















Cusco

Ciudad viva tallada a piedras vivas,

la historia late y en vos se respira.

Sonrisas blancas en tez cobriza

esbozan el hoy y él se asoma, declinan

oprobios seculares, mutan, mixtura fresca,

orgullo de la raza, colores de la tierra.

La ciudad se dibuja en recovas, portales,

ventanas azules, mampuestos y lenguajes,

ella nos apaña y nos sorprende, caminarte

es descubrirte a ángulos, enfoques variables.

Los mantos de tejas y la plaza envuelta....

allí la vida, cuerpos persistentes, bulle perpetua....

La vida arropada es centro del atardecer,

las luces desde lo alto, cientos a la vez,

compiten con las estrellas, mi marcha

por tu día y noche me vuelve enamorada.

Persistencia de olores, de destinos,

persistencia, todo marcado en este signo.












Cusco - Haikus


Buscar en muros

lenguajes, miles de ojos,

voz del oprobio.



Color que late,

la historia se devela

en persistencia.



Vida que bulle,

arte y dolor se expresan,

voces de piedra.









Sonrisas blancas,

la adversidad se quiebra

a resistencia.




Tejados, sol,

la plaza envuelta y ambos

como un amparo.


Leerte ciudad

en ritmos, voces, tramas,

sensualidad.


Tu gente, su habla,

mar diverso de pasos,

el mundo es amplio.



Dolor, granito,

ombligo de otro tiempo,

vencer vencidos.





Voz, finitud,

si el hoy aún se labra,

siglos declaman.



Piedra sobre piedra, grito de los vencidos...



















Machu Picchu I



Mudez mineral de las piedras
en sus superficies perfectas,
en encastres en ángulo,
las líneas quebradas, rectas
narran sobre sus talladores,
las manos cobrizas, moradores
de otra forma de creer la vida.
Vislumbrar el espeluznante dolor,
el absurdo genocidio, la voz
de acallados, de oprimidos,
matanza de hombres, reiterado desatino.
Y la selva te abraza, piedra
engarzada en verde estela
de foresta y nube, ellas te apañan,
dioses,sabiduría cercenada.







































Machu Picchu II


La historia tiene narradores oficiales,
ella se quiebra y su voz aún se abre
y es roca trabajada, dioses vislumbrados,
dolor de los vencidos. La ciudad en alto,
acunada por selva y nube, susurra:
otro lenguaje, otras glorias, la orfandad
ante los astros, su tajeada soledad,
la piedra espera su revancha y ella
no se cumple, miles de veces no llega,
como una herida expuesta, dolor mineral,
el alma de la roca nos habla pertinaz,
el horror humano no tiene fecha ni final,
el horror está expuesto, busca su límite.
Belleza de hombres que tal vez fueron felices.
En breve la noche caerá y en ella seremos
aún más huerfanos, más desamparados
majestuoso silencio, seres devorados.

Piedra sobre piedra, grito de los vencidos,
en el abismo de los siglos, petreos vestigios,
sabiduría amordazada, la montaña es deslinde.








Sólo entre amigos desnudarnos: el ánimo, el ánima...

Wassily Kandinsky













Navegación


Me golpeo, me hago añicos,

y no es poco, aún así sobrevivo.

Como cada uno yo inscribo

mi epopeya en el listado

de lo irresuelto, hechos perdidos.

Cada mañana es un simulacro,

cada ocaso un regreso ansiado.

El orden se vuelve punto seguro,

mojón de apoyo, orden sobre el caos.

El azar nos vacía de etiquetas,

nada, pero nada está pautado.

Resistencia diaria, este navegar

la vida, no hay sabiduría, magia,

sólo persistencia, sólo resistencia diaria.






Dosis de amigos


Sólo entre amigos

desnudarnos:

el ánimo, el ánima,

descarnada osamenta,

orfandad expuesta,

sólo entre amigos

lo que somos, tal

como somos, cuenta.

Y la vida comulgada

se dulcifica. Desaguan:

voces, lluvia de palabras,

estar juntos, celebrar

la vida como es, como si nada.

Y nos sentimos mejores,

metamorfosis extraña,

se suman sueños, se olvida,

se sueñan imposibles,

amnesia momentánea.


Cueva de las Manos - Santa Cruz (Argentina)



La hora se resbala gozosa ...

Gustav Klint
















Oración

Tal vez, la hora
se resbala gozosa,
casi enredada
en garúa y cristal.
Tal vez, dejarse estar,
dejarse amar,
hace de vivir simple,
primario misterio,
entre escasas letras ésto
muta en oración cotidiana,
agradecer la luz,
el roce de tus labios,
la sensación grata
de que tal vez, sólo tal vez
vivir pueda doler menos.
Entretejemos voces,
desvaríos de deseos.



Fusión nocturna

La noche
se nos regala
en tiempo,
derroche...

Busco tu forma,
en el cansancio
molde y contraforma
mi cuerpo se funde.
Te escucho, te respiro
y la piel se tensa,
inventa unirnos,
epidermis nuestra,
rozarnos en un mito:
el de creernos al unísono,
bajo la noche que arrulla.
Me sueño parte tuya,
oníricas son las sombras,
es que en el día te extraño,
amada, amputada forma.
Sábanas debajo espero,
tuyos, míos: carnes, huesos.




Ricardo Carpani



Aquí nos reconocemos irrelevantes...

















Pampa

Linealidad de este paisaje,

me consterno
ante una estrecha línea de tierra,
ilimitado el cielo.
Orgía del color en simples tonos,
la luz como alborozo.
Verde sobre infinito, deshilado verde,
la vista se estremece.
Enramadas y sinfonía de viento,
abismo de silencio.
Aquí nos reconocemos irrelevantes,
bebemos paisaje,
nos asumimos casi seres inexistentes,
mar de la vida,
equilibrio y mutación, así la muerte
y la vida se enlazan,
equilibrio cierto, belleza y pampa.
Somos horizonte, línea,
y la vida arriba, por debajo enarbolada.



Viajo


El campo envuelto en nubes, honda
imagen, perdio horizonte y flotan
árboles a deriva de la bruma tosca,
aquí me siento vulnerable,
esa línea segura, inalcanzable
desapareció de este mundo.
Descolorida sinfonía, escucho
los sonidos de la inmensidad,
si pregunto no hay respuestas.
La tarde gotea en su belleza,
destila cielo en su gris esencia.
El cristal me devora en asombro,
el auto deglute ruta insaciable,
vamos hacia un punto en la tarde
donde las paralelas creo se tocan.
Nada es seguro ni ese ríspido axioma,
si: nuestro desamparo y este instante.


J. M. W. Turner


Fusión del afuera y el adentro...

Brueghel
















Coordenadas

El afuera en su locura
nos gira entorno,
el diario bochorno
nos asfixia...
¿cuáles son las medidas,
las razones mínimas,
coordenadas claras,
equilibradas?.
Se desplazan vidas, seres.
No razones, no pienses.
Un punto de consenso,
punto de concierto.
Fusión del afuera y el adentro,
a dosis de amor me alimento,
a escuchas y a silencios,
retinas en ofrenda.
El cielo magnánimo despliega
su dimensión envolvente,
calma a nubes y celeste,
ir, vagar irreverente.




Dibujando dioses

Vientos de los días y sus horas,
aquí vamos de cara a la ventura,
a lo inesperado. Se escuchan
las voces de este hoy, volátiles
se evaporan en constante premura.
A aquellos que buscan glorias
les aclaro, yo ácida y sórdida
les vaticino: también se evaporan.
Glorias mundanas de quienes son
a simple costo de otros. Tentación
mía de soñar aquel juicio eterno,
idílicas escenas del renacimiento,
entrar de puntillas, rayos cayendo,
conseguir destinos de puro infierno.
Vientos de los días y sus horas,
aquí aferrados a la nada de la nada
navegamos por este vivir incierto.



Genileza:www.superfondos.net

Intento ver a través de tus ojos... amores diversos...


Sintonía (Inés en el sur)









Intento ver a través de tus ojos,

eso nos es negado,

intento sentir a la par de tu gozo,

y casi, casi lo logro.

Dejarme llenar por otros paisajes,

sé te rozan el asombro,

sé te alborotan la realidad conocida,

el mundo se amplía,

se exhibe a tus frescas, ávidas retinas.

Musgos, turquesas,

horizontes quebrados, frías cortezas.

Nada se percibe por otro,

nada ni nadie impide comulgar el gozo.

Aspiro néctar rocoso,

los sentidos se esfuerzan en alborozo.



Guerra santa


Quererte es también

esta instantánea rabia

que me desbarata,

mi furia escuálida

y en el viento de miradas

verla evaporada. Ámbar,

la atmósfera misma difama

nuestros malos sueños.

Rendirnos a los hechos:

prefiero ahogarme a besos,

beberte a caricias el cuerpo.

Bendita guerra de querernos,

impotencias, desconciertos.

Sumo abrazos. Braceamos,

río de la vida, aguas abajo,

río del azar, nos vulneran,

me angustio, nos sublevan.

A filo de tu boca: desfiladero,

a filo de vos: asidero.

Quererte es también esto:

esta instantánea rabia,

brumas entorno que se levantan.


Monet Claude

Ya boqueamos como peces sobrevivientes...























Escher


El sol sobre la piel, supervivencia

Mantenerse a flote,
vivir casi no duele
el agua me rodea y me sostiene,
flotar sobre lo hecho,
sobre los restos,
disfrutar de estar así, de cara al cielo,
distender ambiciones,
degustar los dones,
muevo lo músculos, siento mis huesos,
el sol sobre la piel,
noción de contener:
oxígeno, percepciones, presentimientos.
Los desvelos desaguan,
lo diario ya es de agua,
no estamos solos, flotamos al unísono,
el universo es acuoso,
un intraducible cosmos.




Como peces

En este concierto de no ser:
somos, milagro de creer
que podemos soportarnos,
es más: absolvernos.
Rasgo de una vez
cristales y miserias,
aspiro, golpe de conciencia,
menguar el desconcierto,
pulsión contra desencantos.
Aires, gestos, ya boqueamos
como peces sobrevivientes,
no razones y no pienses.

Vive y ama,
lo demás se desmiga
y se desgaja,
lo demás se desgrana...




Escher



Lo ínfimo, lo importante,... ¿qué es lo uno o lo otro?...




Día o noche


Relativamente…
como cada mínimo hecho
se hilvana con otros, los restos
de lo dicho, de lo sentido
relativamente…
flotamos con un esfuerzo estéril,
lograr el cotidiano equilibrio,
bracear contra uno y la corriente,
relativamente…
como todos, a veces creo estallar,
encierro en desazón este mi mar
de ansiedades, no hay remedio.
Y un día o noche,
jamás está escrito ni previsto,
se quebrará vivir en presente,
no podré observarlo, todo es relativo,
seré otro más:
ausente inmodificable, sin aviso.




Poema pequeño

¿Cómo hablar de amor
desde lo cotidiano?.
El ruido de tu llave
es reconocible, late
y tajea los silencios...
¿es aún, acaso, eso?





Carlos Terribili
Hombre y mujer
Tintas - 2004