Palabras con rastros nocturnos, con restos de luna...
Esas noches
La noche flota en el aire
con sus voces de ciudad,
con sus estridencias
y aún así es bella.
El aire tibio nos libera
ventanas, nos invade
y sugiere jazmines,
olores que traen
otras presencias.
La noche se desliza
en los cuartos, entra
en ellos y en las almas,
primeras noches de verano,
abusan la confianza,
nos consienten, subyugan
la ciudad es edificio y luna,
es la de siempre
pero a balcón abierto,
a asombro abierto.
Lunas
En la oscuridad de la noche
reflejos sobre el agua que corre,
en la ciudadana zanja las lámparas van
regalándonos brillos de luna virtual.
Van Gogh, Vincent
Palabras que ruedan, como rodamos nosotros...
Historia de transeúntes sin cabeza
Es difícil convivir con la locura
del mundo, atraviesa las rendijas
de las horas, embebe nuestras vidas.
Demencia globalizada...
dosis de indiferencia en comprimidos,
para mediáticas miserias: mediáticos olvidos,
sobredosis de insustanciales imágenes.
Así duermo, así vivo...
Y las pantallas nos reciben al llegar,
nos arrullan, en trasnoche arropan y sin más
nos entregamos, seres decapitados.
Sólo nos ve la luna
marchar descabezados,
ella tan dulce como muda,
observa sin azorarse.
Debajo la multitud gana las calles.
Círculos
Todo rueda:
las hojas que se caen,
grises las aceras,
rotan los bostezos
en un mar de indecisiones,
los sentimientos
se agitan, entrecruzan, evaporan,
la vida gira
y vivir es este rodar por ella
sin alternativa.
Edward Hopper
Tanto ha sido dicho... pero no puedo callar...
Todo el respeto...
todo el dolor...
revivimos la orfandad...
Mercedes Gracias.
Palabras sin voz... por vos
Tu muerte como otras, pocas, es razón
indeclinable para inventar un cielo,
(poco importa lo que en realidad creo).
La orfandad nos deja ese, su sabor,
amarga la tarde, te llora el alma,
hueco vivo, dulce e hiriente llaga,
en vos tantos invisibles se acallan.
Un cielo como ilógica persistencia,
un cielo, un ruego... muerte que doblega.
Mi mente abarca una visión cotidiana,
no hay resquicio, indicio, simple raja,
y el alma vaga como desconsolada.
Un cielo para Mercedes, excavemos la nada...
5-10-09.