Caminante
Camino
una ciudad
para que
me hable de su gente,
corteza
material,
lenguaje
de mil seres presentes,
sombras
y cristal,
muros
que tallan habitantes y ausentes.
Yo me
dejo seducir,
la vida
se insinúa, grita desde lo inerte.
Frontis
Doblegar
al mármol
en sus
formas blandas,
estáticas,
él se delata,
manos,
mentes, mensajes
y la
piedra es un arte,
es un
lenguaje mudo
que nos
repica, sólo late
me paro
de frente,
calculo
línea, figura,
la lente
en captura,
mis
dedos se aplican,
la roca
es palabra, replica...
misterios
que niegan
dimensión,
décadas,
tersura
interna, petrea...
Frontis
El
marmol habla
a manos,
a cinceles
en voz
callada.
Rosario
13
Me salen
tus imágenes desde las yemas,
desde
los poros, mis ojos como lentes prestas,
disparo
lo obturador hacia las cornisas,
al filo
de las sombras, molduras vivas
que el
sol desdobla, estira, apaga.
Tres
días se diluyen , aires de nada.
Busco en
una otras ciudades, la real
se
multiplica, laxo el ritmo del feriado,
revive,
se abre a la mañana del sábado.
Intento
leer voces, tensiones de la gente
y rozo
cemento, marquesinas, mi mente
recorre
molduras, herrajes. La ciudad está
sobre
las aceras, en rostros, en ansiedad
por
vivir el día en la sucesión de cada día...
Imposible
atraparte, vislumbrarte, obturo
mi
cámara, mástico cristales y muros,
belleza
de argamasa. Y tu cielo encima
desplegado
sobre el río, embarrancada la vida.