
Escher.-
Diarios monstruos
Zaranda para los temas, para esos diarios
monstrouos que domestico y alimento.
Convivir con ellos, infundados aún temo.
La mente los tasa, los mide y descarta,
pero cuando siento el miedo embebe, empapa.
Oler el temor, la pesadilla, la sin razón.
Entonces a puro ojo retrato a la luna,
busco complicidad amiga, hallo la fortuna
en una moneda caída, me embriago a amores,
doméstico y elemental amor, vitamínicos goces.
Y los monstruos se empequeñecen, se retractan,
me velan y aún me esperan en retaguardia.
Hora precisa
A color de los jacarandaes
la tarde se florece, en lo alto
el cielo detalla gradual al ocaso,
última luz, como un grito urbano,
a ras, bien a ras,... reptamos.
Gentileza:
susanatoscano-losarboles.blogspot.com