A veces miro el deshilachado orillo de la tarde...







Una tarde, peso neto x horas




Me inclino sobre la tarde,
elevo su deshilachado orillo,
entonces me perfilo y miro:
cuántos instantes condensados
por la única, máxima razón
de vivir esas pasteurizadas horas
intrascendentes, definitivas,
van todas tan envasadas
sin aclarar su marca registrada.






Bostezo

Bostezo,
ahueco mi boca,
con todo el hartazgo
bostezo,
es casi un suspiro largo,
una proclama, un ruego,
el aire escapa.
Bostezo:
contra lo incierto,
los mal invertidos esfuerzos,
la indiferencia,
contra inútiles soledades,
contra agresividades,
contra... .
Mi boca redonda,
fuelle, exhala, exclama:
después de tanto,
de pasar todo,
ahora, es hora.



M. C. Escher



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